Acto de Apertura
El solemne acto de apertura del XXI Encuentro tuvo lugar el día 19 de 2008 en el salón de actos de Instituto de Educación ''Siete Colinas'', hacia donde se trasladaron todos los asistentes desde los distintos hoteles del centro de la ciudad.
Bajo la dirección Sr. Obispo de Cádiz y Ceuta se realizo de manera comunitaria, la oración compuesta con motivo del Encuentro por el Rvdo. Padre D. David Gutiérrez Domínguez, Director Espiritual de las Hermandades de la Entrada en Jerusalén y Nuestra Señora del Rocio de Ceuta y que a continuación reproducimos, para que a todos os sriva de recuerdo.
Oración del XXI Encuentro Nacional de Cofradías Penitenciales
Te damos gracias, Señor, Padre Nuestro
porque eres infinitamente bueno con nosotros.
No nos abandonaste en nuestra vida de pecado
sino que enviaste a tu Hijo Jesús a nuestra Tierra
para, con su muerte en Cruz y Gloriosa Resurrección, nos salvara y nos redimieras.
Te pedimos Señor, que las Hermandades y Cofradías de España,
reunidas en este Encuentro Nacional,
seamos miembros de tu Iglesia.
Y, con la fuerza de tu Espíritu,
demos testimonio de tu amor a los hombres y mujeres de hoy.
Ayúdanos a que nuestras prácticas devocionales y de piedad,
junto con las obras de caridad,
sean un eficaz instrumento de evangelización
en medio de una sociedad cada vez mas descristianizada.
Te ofrecemos todos nuestros proyectos,
nuestra vida, trabajos, alegrías y esperanzas,
para que las bendigas y protejas.
Confiamos en la poderosa intersección de la
Inmaculada Virgen María,
Madre tuya y Madre nuestra,
para que nos cobije con su manto maternal
y nos ayude a poner en práctica su consejo de Caná:
de hacer lo que Tú nos digas.
Toda nuestra oración
la ponemos en manos de tu Hijo y Hermano nuestro,
Jesucristo nuestro Señora.
AMEN.
Una vez finalizada la oración, fueron tomando la palabra el Presidente de la Ciudad Autónoma, el Presidente del Consejo, el Comisario del Encuentro y por último el Sr. Obispo, quién daría por inagurado el Encuentro, dando paso a un denso programa, que se iniciaría en ese mismo salón con la primera ponencia a cargo de D. Antonio María Calero de los Ríos y que por un compromiso de última hora en su orden, tuvo que ser leída por el Delegado Episcopal de Cuenca Rvdo. Cesar Fernández Cano.